Krabi—
Las autoridades de Krabi han asegurado a residentes y visitantes la seguridad de la provincia tras una serie de incidentes relacionados con presuntos artefactos explosivos y amenazas en línea. Las autoridades confirmaron que todos los objetos sospechosos reportados en el distrito de Mueang Krabi han sido asegurados con éxito y se encuentran bajo análisis forense.
El gobernador de Krabi, Angkoon Silathewakul, junto con el general de división Pornchai Khajornklin, subcomisionado de la Región 8 de la Policía Provincial, y funcionarios de seguridad del Comando de Operaciones de Seguridad Interna (ISOC), celebraron una conferencia de prensa en el Salón Provincial de Krabi el miércoles por la noche para abordar las preocupaciones del público.
La Policía Real Tailandesa, en coordinación con equipos de Desactivación de Artefactos Explosivos (EOD), cuatro unidades caninas y agencias de seguridad locales, lanzó un intenso rastreo en varios lugares detectados en amenazas en redes sociales. Se descubrió una motocicleta sospechosa cerca de la Mezquita Central de Krabi, pero no contenía materiales peligrosos. Sin embargo, en otras tres zonas —incluyendo un parque de esculturas de caoba y una señal cerca de la playa de Noppharat Thara— se encontraron objetos sospechosos que fueron desactivados de forma segura y recogidos para su posterior análisis.
El Comisionado Adjunto Pornchai afirmó que toda la operación siguió estrictos protocolos de seguridad y demostró la eficacia de la coordinación interinstitucional. "Se han despejado todos los puntos de preocupación y la situación está totalmente bajo control", declaró. Se están realizando investigaciones para rastrear el origen de las amenazas y a las personas involucradas.
El gobernador Angkoon explicó que se están reforzando las medidas preventivas en toda la provincia. Se ha instruido a todos los departamentos gubernamentales para que refuercen la vigilancia, especialmente en zonas de alto tráfico, como oficinas gubernamentales, destinos turísticos, centros comerciales, hoteles, centros de transporte, lugares religiosos e instituciones educativas. Funcionarios locales, equipos de seguridad de las aldeas y líderes comunitarios también se han movilizado para apoyar estas iniciativas.
“Instamos al público a mantenerse alerta y reportar de inmediato cualquier comportamiento sospechoso a las agencias de seguridad”, declaró el gobernador Angkoon. “Krabi sigue siendo un destino seguro y nos comprometemos a garantizar el bienestar tanto de los residentes como de los turistas”.
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